El cardenal Osoro en su despedida como arzobispo de Madrid: “El anuncio de Jesucristo ha sido mi pasión”
24/06/2023El prelado ha presidido una misa de acción de gracias en la catedral de la Almudena en la que ha agradecido al Señor «su etapa al frente de la Iglesia madrileña»
La catedral de Santa María la Real de la Almudena de Madrid ha acogido este sábado una solemne y emotiva Eucaristía en acción de gracias con motivo de la finalización del ministerio episcopal del cardenal Carlos Osoro como arzobispo de Madrid. El prelado ha estado acompañado por una gran cantidad de obispos y arzobispos españoles, además de contar con la presencia del Nuncio apostólico en España, Bernardito Auza. Durante la homilia, el cardenal Osoro se ha mostrado muy agradecido por su etapa al frente de la Iglesia madrileña. Ha expresado que “la Palabra del Señor que hemos proclamado ha sido muy clara: por ello la acojo con todas mis fuerzas, así puedo decir también con el Sal. 138: «te doy gracias porque me has escogido portentosamente, porque son admirables tus obras; conocías hasta el fondo mi alma». Agradezco al Señor que a través de la Iglesia me siga recordando que me regaló una tarea especial: «es poco que seas mi siervo…te hago luz de las naciones, para que mi salvación alcance hasta el confín de la tierra» (Is 49, 1-6).“Gracias, Señor, por tu elección”Osoro ha indicado que al dejar la actividad de gobierno pastoral de la archidiócesis de Madrid, siente “la dicha de poder decir con el profeta Isaías, sí, «el Señor me llamó y pronunció mi nombre»… y «tanto me honró el Señor y mi Dios fue mi fuerza» que me eligió para que su salvación llegase a todos los hombres. «A vosotros se os ha enviado este mensaje de salvación» (Hch 13, 22-26). Gracias, Señor, por tu elección y perdón por todas mis fragilidades e inconsecuencias que he tenido en la misión para la que tú me elegiste”.“El anuncio de Jesucristo ha sido mi pasión”Ha incidido además que a lo largo de su ministerio episcopal ha servido de norte a sur y centro de España, recordando que fue obispo de Orense, arzobispo de Oviedo, arzobispo de Valencia y arzobispo de Madrid. Ante esto, ha afirmado que “pido al Señor que me perdone todo lo que no me hizo dar testimonio claro de Él. Y a todos vosotros os pido misericordia: quise pasar junto a vosotros haciendo el bien, pero sé que en algunas ocasiones no lo logré. Perdón, misericordia y gracias. Doy gracias a Dios por este itinerario de mi vida episcopal. Aprendí a amar, servir y dar la vida en la Iglesia a la que quiero con toda mi alma. En ella el anuncio de Jesucristo ha sido mi pasión. A pesar de mis límites y pecados he sentido ciertamente la mano del Señor dándomela siempre”. El cardenal ha querido acordarse de todos, y es que, tal y como ha señalado, “he querido estar con todos, a los de dentro, a quienes he animado a que se acerquen y estén también con los de fuera. Gracias Señor por todas las personas que me han ayudado: sacerdotes, religiosos y laicos. Al presbiterio diocesano, a la vida consagrada, a los laicos: gracias”. Ha invitado también a rezar por él, expresando que “os entregué mi tiempo, mi saber y mi hacer, estuve siempre ocupado por vosotros, perdonadme las veces o los momentos en los que os fallé en mi dedicación”. “Seguiré rezando por todos vosotros”Por último, ha expuesto que “desde hoy mi trabajo y dedicación fundamental será seguir rezando por vosotros. Recé por todos vosotros, ahora lo seguiré haciendo con la gracia de Dios, con más tiempo y dedicación a la oración. Pongo a la Iglesia que camina en Madrid en manos del Señor. Os he querido y habéis sido desde que fui nombrado arzobispo de Madrid, mi ocupación fundamental, pero además con la tarea más bella que un ser humano puede tener: daros a conocer a Jesucristo. Pues esta, pero de otra manera, seguirá siendo mí pasión por vosotros”.
