Este es el número de veces que Montse ha saltado en paracaídas a sus 90 años: «El sueño de mi vida»
25/10/2023Montse Mechó tiene 90 años y ha saltado en paracaídas en paisajes tan espectaculares como el desierto de Arizona, o los bosques de Finlandia
En ocasiones, la mente nos puede jugar malas pasadas y tenemos que reaccionar rápido ante un imprevisto que se nos pueda presentar. Por eso, a veces, tenemos que dar varios saltos al vacío y jugárnosla. Aunque también se puede hacer literalmente y saltar de un avión en paracaídas. Montse Mechó sabe mucho de eso porque a sus 90 años, se ha tirado de las dos maneras. Y con paracaídas, lo ha hecho 936 veces. La última vez, hace dos años, es decir, con 88. Era el sueño de su vida poder saltar en paracaídas y pudo hacerlo en paisajes espectaculares como el desierto de Arizona, o los bosques de Finlandia. Además, de esos casi 1.000 saltos en paracaídas, ha buceado a 50 metros de profundidad, hace windsurf e incluso, ha bajado el Aneto esquiando. Montse, a su edad, sigue trabajando. Es la presidenta de una conocida marca de tuppers, y asiste a congresos, el último sobre la artrosis. Explicaba en ‘La Tarde’ sobre el salto en paracaídas que «es el sueño de mi vida, yo nadaba, hice saltos de trampolín y palanca, en el año 51 hicimos los campeonatos de España de natación y entonces necesitaban una saltadora para que representara y resulta que gané».Su primer salto en paracaídasLa primera vez que Montse saltó en paracaídas tenía 49 años, decía que su hijo Eduardo, «tenía una escuela de Windsurf y me dijo cunado acabes de dar las clases de natación, te vienes que podrás navegar en el windsurf». Entonces, cuando se presenta allí, su hijo le comentaba que estaba realizando un curso de paracaídas y que en media hora se tendría que ir. Lo que le contestó Montse es que ella también quería ir y así fue.»Mi hijo sabía que yo era una deportista y dice bueno, dadle el curso. En esa época era como los soldados, tirarte como una cinta que te extraía el redondo y te tirabas tú solo, no había tándem todavía».Montse, una mujer felizMontse es una mujer que siempre va con la sonrisa por delante, es una agradecida de la vida y siempre tiene algún motivo de estar feliz. Testigo de su carácter es su hijo Ignasi, que vive en Holanda, y que estuvo presente en el último cumpleaños de su madre.Él siempre hacía deporte con su madre, «en nuestra familia el deporte era fundamental, siempre con la filosofía de que el deporte no es algo en lo que vayas a competir, para ganar a otros y conseguir una medalla, sino disfrutar para formarte humanamente».Último sueño por cumplir A pesar de sus 90 años, a Montse todavía le queda un sueño por cumplir, decía que ella «tiene dado el cuerpo a la ciencia porque yo no quiero que me hagan nada y así cunado se enteren de que he desaparecido, que cojan una copa de cava y que brinden por la Montse que estará por allí arriba volando con sus hijos».
